Las bondades del VALLE DEL LIMARÍ

Buen clima, ricos productos y emergentes vinos resumen nuestra visita a este rincón del norte chico.

Fuimos invitados a vivir la experiencia de la Fiesta de la Vendimia del Valle del Limarí, una de las fiestas de la vendimia más “nuevas” de Chile pero que tiene grandes vinos, buenas viñas y un suelo que esta dando mucho que hablar.

Nuestra primera parada fue en Viña Tabalí donde nos recibieron su destacado enólogo Felipe Muller junto a el viticultor Héctor Rojas y su encargada de Turismo, Vivian Mosnaim. Aquí además de conocer parte de su proceso e instalaciones, conocimos su cava subterránea que tiene un enorme mural que nos cuenta escenas de la época indígena de la zona, donde mayoritariamente dominaban los diaguitas y molles.

Luego de este tour, salimos a su “rustica”, pero muy bien hecha terraza a probar sus ricos vinos, en esta visita probamos sus vinos Sauvignon Blanc 2012, Chardonnay y Pinot Noir todos del mismo año y de la misma línea Talinay, y degustar productos locales como los camarones de río, las chochas (que para mi fueron completamente novedad), quesos de cabra de Las Majadas, pastel de choclo con pino de camarones y varias otras delicias locales a cargo de la joven banquetera local, Ana María Santibañez.

Nuestro recorrido continúo con un evento de Pisco Waqar en el Hotel Limarí, donde junto con probar este maravilloso pisco (que es mi favorito y el mejor pisco del mundo según el concurso anual San Francisco World Spirit Competition 2012), probamos diferentes, frescos y ricos tragos en base a Waqar y un abundante cóctel con productos de la zona.

Al otro día partimos temprano a la Viña Ocho Tierras donde nos recibió uno de sus dueños, Rodrigo Guerrero quien mientras nos mostraba su bodega nos iba contando la historia de la viña y de sus vinos. Se trata de una bodega pequeña que existe desde el 2006, actualmente trabajan ocho personas que están a cargo de 61 hectáreas de viñedos los que producen 8.000 cajas de vino al año.

Después de esta visita nos devolvimos al corazón del Valle del Limarí para visitar la Feria Modelo de Ovalle (que existe hace mas de 60 años), conocer la oferta y variedad de productos locales y las cocinerías de las locatarias de la feria donde nos comimos una buena pesca frita con abundantes ensaladas y probamos las cervezas artesanales de la zona.

Luego, entramos en tierra firme y nos fuimos a la Plaza de Armas de Ovalle a disfrutar, vivir y sentir la Fiesta de la Vendimia del Limarí. En torno a la plaza una veintena de stands de viñas y pisqueras que incluían degustaciones de sus brebajes, exquisitos productos locales y cocinerias típicas daban la vuelta a la plaza y rodeaban en enorme escenario por donde pasaron varios artistas nacionales animando el fin de semana de fiesta de los ovallinos.

Ahí estuvimos para la ceremonia de inauguración que contó con la presencia del alcalde, el señor Claudio Rentería, autoridades de la zona y el productor del evento, el chef local, Juan Ruilova. Ya pasada la media noche nos fuimos de la plaza con la sensación de haber vivido una buena, completa y muy bien organizada fiesta de la vendimia.

Al día siguiente, después de un buen desayuno en el hotel Limarí, partimos derecho al Museo del Limarí donde la misma directora del museo, Daniela Serani nos hizo el tour guiado, donde pudimos ver piezas originales, otras restauradas y entender esta fascinante cultura que es mucho más que diaguitas, jarro pato y molles. Imperdible! 

Y, para terminar nuestra visita a este bonito Valle, Viña Dalbosco nos estaba esperando con una degustación de sus vinos. Su enóloga, Lorena Veliz,  nos explico de la viña que se ubica en Punitaqui, sus procesos y vinos. En la oportunidad probamos su recién estrenado Rosé, junto a un rico Viogner y su Syrah-Carmenere. Para la despedida, su jefe de ventas, Raúl Carmona nos tenía preparada una sorpresa para llevarnos a casa, una caja con vinos de la viña.

Sin duda, el Valle del Limarí merece darse una vuelta, conocer sus productos locales, sus tierras, sus pueblos, vinos y piscos que poco a poco han tomado vuelo y han sido destacados a nivel mundial. Sabores nuevos, productos novedosos, vinos y piscos maravillosos.

Gracias por la invitación y gracias a cada una de las personas que nos recibieron en Ovalle y sus alrededores.